domingo, 30 de noviembre de 2008

Valentino ó.ò

Me voy a volver periodista. Si, así es. Ayer por la noche cené en un restaurante que se llamaba “Valentino”. Un lugar pequeño donde servían sushi y un par de platos normales pero con nombre difícil, tipo “Milanesa con papas fritas → Tai Kao Tu Chuan (?) (sic)”.
Tenía un hambre de morir y pasaron diez minutos hasta que nos atendió una moza, petisita de pelo largo. Nos dio las cartas y a los diez minutos volvió. Yo pedí un “Pollo al verdeo” por que era lo único que no tenía ni pescado crudo ni soja ni salsa raras.


La comida no llegaba. Eramos un poco más de diez personas en el lugar, nosotros tres, dos parejas de dos y otros que estaban sentados en un rincón, que no llegué a contar cuantos eran. A nadie le habían servido la comida, y la cena tardaba todavía mas en llegar. Ni la panera teníamos para masticar.
A los quince minutos volvió la moza a informarme que no tenían mas pollo al verdeo. Entonces pedí sorrentinos con calabaza. Ya eran las once y media. Llego el vino con soda que pedimos y cuando quise ver, la tipa me puso más vino del que esperaba en mi copa. Y eso que tomo vino de ver en cuando. Lo estire con soda.



Se hicieron las doce y pico (perdí la cuenta de los minutos). Tenía mucho frío, y recién lo notaba. No sé a que loco sádico se le ocurre tener el aire acondicionado al taco y la puerta abierta un día donde tanto frío no hace. Me fije en una de las mesas. Una pareja que había llegado diez minutos después que nosotros le habían servido un plato de rabas. Me gruño el estomago y me pregunte cuanto más iba a tardar la comida.
Entonces entro alguien al lugar, un tipo con la mano vendada y el uniforme negro. Siguió de largo, sin sentarse en ninguna de las mesas vacías y entró a la cocina.


-Ese seguro que es el cocinero- bromeó mi mamá que también estaba con hambre.

A los cinco minutos llegó por fin el primer indicio de comida: Un tarrito con un puñado de palitos. Nos comimos eso, por el mero hecho de llevarnos algo a la boca, mientras la moza decía que “Perdón por la tardanza el cocinero se quemó”.

-Si, se ve que era ese el cocinero- bromeo otra vez mi mamá haciendo alusión al tipo de la mano vendada.

Finalmente, a las dos doce tirando a ser la una ya llego la comida: Un plato con cuatro sorrentinos para mí, dos bifes pequeños con diez papas fritas para papá y un plato con seis verduras para mi vieja. Mientras comía me preguntaba “¿¿Para esto pagamos mas de sesenta mangos?? ¿¿Acá están a dieta o quéé??”. Le pedí a la mozamongui (no es plagio de la peleadora, me estoy dando cuanta que es un patrón de la sociedad) otro vino y otra soda, por que en la espera se nos había acabado y que cerrara la puerta por que entraba frío.

Cuando termine de comer decidimos pedir, de paso, para no tener tanto hambre un postre. Yo pedí un helado de naranja con salsa de miel.
Ya eran las dos menos cuarto cuando llegó el postre. Lo terminados en cinco minutos. Por suerte no hacia tanto frío, por que sino volvía a estar tiritando. Y para esa hora tenía mucho sueño. Pensar que por un momento creí que podría llegar a casa y pasar el trabajo de lengua. Pedimos la cuenta y a los diez minutos la trajeron. Mi viejo miro la cuenta y exclamo no muy fuerte:


-¿¿¡¡Cómo 176 pesos??!!-

Claro, bien sumado daba 146 ¿De dónde salieron con otros treinta pesos? Le reprochamos a la moza que estaba mal sumado y volvió con la cuenta corregida: 156. Le iba a reprochar otra vez, pero la tipa ya se había ido. Fue, le pagamos eso y nos retiramos del lugar. Las dos y media de la mañana cumplidas.


Moraleja: Además de fijarte si en el restaurante hay gente y esta limpio, fijese si la gente esta comiendo.

3 comentarios:

Manuel Lunari dijo...

la verdad, da hasta lastimaa como atienden en algunos lugares, realmente es reprochable...yo conosco un lugar aca en rio tercero, que pedis una pizza y despues de dos horas de espera, te traen un intento de pan quemado con queso, da asco la verdad, me gustaria saber por que la gente no tiene ganas de trabajar......ah y por cierto!! ya termine las clases muahahaha xDDD (?)

Anónimo dijo...

fijate q dice los esperamos pronto jajaja q cara rotas!

MaXMauser dijo...

me gustó cómo lo contaste y la moraleja del final!